La inspiración es dueña de las más inesperadas visitas. Llega a horas intempestivas. Llega a horas programadas. Llega y hace parada y fonda y hay que aprovechar para acostarse con ella. Hoy ha venido a abrazarme de madrugada y no le ha importado que llevase bata y cara de pocos amigos. Sabe que despierto si me halla dormido y que duermo si no me quiere ver despierto. Un proyecto en prosa en camino y un proyecto en verso para cerrar. Un saludo a todos y a todas y a vuestros y vuestras inspiraciones.